Dedicada al tratamiento quirúrgico de las cataratas, sin importar el origen de las mismas. Se remueve el cristalino opaco y se coloca una nueva lente artificial transparente, seleccionada de acuerdo a las necesidades de cada paciente individual.

Lidia con patologías que afectan la estructura más anterior del ojo, la córnea. Estas pueden provocar infección, inflamación, opacidad y/o deformación corneal.

Trata las desviaciones de uno o los dos ojos, de modo que sus ejes visuales dejen de estar en direcciones distintas, y apunten hacia el mismo lugar, para poder tener una visión binocular normal.

Para aquellas personas que tienen presión ocular elevada, de manera tal que puedan prevenir los daños que la misma genera, o ralentizar la progresión si ya se han perjudicado estructuras oculares.

Tu primera consulta debería ser con un oftalmólogo general. De ser necesario, él te derivará a otra especialidad. También podés acudir para hacer una nueva receta de anteojos, un control, si tenés síntomas oculares, o una urgencia.

Esta especialidad se encarga de la salud visual de los menores. Según la Sociedad Argentina de Oftalmología Infantil, los niños deben realizarse controles oftalmológicos con dilatación pupilar en las siguientes edades: nacimiento, 6 meses, 1 año, 3 años, 5 años, y luego cada 2 años.

Se encuentran en el terreno de la especialidad “oculoplástica”. La misma da solución a cuestiones estéticas (como verrugas), molestas (como caída de los párpados) o peligrosas para el paciente (como tumores o la inversión de párpados y pestañas hacia el globo ocular).

Propone y efectúa soluciones para aquellas personas que tienen problemas refractivos (miopía, hipermetropía, astigmatismo y/o presbicia) y quieren dejar de usar anteojos y lentes de contacto.

Pensada para aquellos pacientes con enfermedades en estas porciones del ojo, como son la retinopatía diabética, la retinopatía hipertensiva, el desprendimiento, los desgarros, o el edema de retina, la degeneración macular relacionada a la edad o el hemovítreo.